10 tips para leer cuentos a bebés

Seguro que a tu bebé le encanta escuchar historias, como a casi todas las personas. Obviamente, su comprensión es distinta a la de los niños y niñas mayores, pero si cultivas la rutina de contar cuentos con tu bebé, le abres una puerta al mundo y amplías sus posibilidades, mientras os sumergís en el mundo de la palabra, de la fantasía y de la imaginación. 

Leer cuentos a bebés estimula su desarrollo neurológico y es una vía tremendamente potente para establecer el vínculo de padres/madres/abuelos/abuenas, etc. e hijos e hijas. Al escucharte, cientos de células cerebrales de tu bebé se conectan, lo que ayuda a establecer vías cerebrales para su aprendizaje futuro.

Intenta usar diversos tonos para expresar enfado, sorpresa o alegría. Esta variación tonal produce una especie de melodía en el habla que es la que nos permite mostrar la intención de nuestras palabras y que nuestro oyente entienda lo que le estamos contando. Los bebés y las bebés no nacen con los cinco sentidos completamente desarrollados, no obstante, el oído interno está en funcionamiento desde la semana 20 de embarazo. Cualquier variación en la entonación estimulará su desarrollo neurológico y provocará que su atención se mantenga alta.

Nunca fuerces la lectura. Tú conoces a tu bebé y sabes cuando transmite calma, lo que propiciará que su atención se mantenga. Evita momentos de inquietud o hambre.

En general, los bebés y las bebés se encuentran mejor cuando existe una rutina en sus horarios y hábitos. Empecemos eligiendo una hora concreta en la que sabemos que suele reinar la tranquilidad para contar nuestros cuentos del día y repitamos esta rutina diariamente, siempre que sea posible. Poco a poco, podremos aumentar las ocasiones diarias en las que contar historias.

La atención de los bebés y las bebés es limitada, por ello, selecciona historias que no tengan mucho texto. Con la práctica, si eres constante en tu rutina de leer cuentos, notarás cómo tu bebé mantiene el interés durante más tiempo y vuestras sesiones lectoras se alargarán.

Tu bebé se comunica contigo desde el primer suspiro. Con sus gestos y nivel de atención, serás capaz de entender qué historias disfruta más y podrás buscar opciones adaptadas a sus necesidades.

Tu bebé y tú tenéis una gran conexión. Si tú estás en un estado de relajación, tu bebé lo notará y es más probable que se encuentre del mismo modo y que disfrutéis en armonía del momento de los cuentos.

Gestualiza todo lo que te apetezca. Siéntete libre de usar las manos, los pies, la cabeza y cualquier otra parte de tu cuerpo para comunicarte con tu bebé. Después de los 6 meses, ya puedes empezar a pedirle que gestualice contigo.

De vez en cuando, podemos transformar los cuentos en canciones. Para empezar, puedes usar la melodía de una canción que conozcas y simplemente introducir la letra del cuento en dicha melodía. Verás como las canciones le encantan y mantienen su interés.

Es normal que tu bebé se mueva, gorgojee o hable. Entendamos las interrupciones como parte de la historia y utilicémoslas en su beneficio, propiciando la interacción con tu bebé.

No tengas miedo de que se aburra contando los mismos cuentos una y otra vez y repitiendo la misma frase que sabemos que le encanta. A tu bebé le da seguridad conocer la historia y saber lo que va a pasar después, además de que también incrementa su vocabulario notablemente.

¡Hasta la próxima! :)

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